22 de mayo de 2009

UNA FRASE

"No les cuentes tus penas a los amigos, que les divierta su puta madre."*

*Frase, de autoría confusa, leída hoy en el facebook del escritor Juan Bas.

19 de mayo de 2009

CONFESIONES DE BLOGUEROS (al hilo de la última entrada del Bellver)

1. Soy un escritor ninguneado. Como nadie entiende mi genio me autoedito. Acabo de abrir un blog. Se van a enterar éstos de lo que vale un peine.

2. Soy un escritor poco conocido pero con obra publicada. El interés principal de mi blog es el autobombo y platillo. Como me aburro de hablar de mí mismo y a estas alturas me parece bochornoso anunciar todos mis éxitos de andar por casa, a veces hablo de otras cosas que tienen que ver más o menos con la literatura: recomiendo libros que me gustan, hago de altavoz de mis amigos, cuelgo canciones que me gustan, hablo de fútbol, etcétera. Un blog de vaguete, que continua casi por inercia, pero que a veces puede deparar alguna sorpresa en forma de recomendación, más visceral que justificada. Ya he dicho que soy un vaguete.

3. Mi blog nació como de autobombo y platillo, pero luego le he cogido la gracia. Me gusta la literatura, entiendo, y creo en los blogs como un escenario alternativo a la ceguera y la falta de criterio de los medios tradicionales. Claro, no soy tonto, y no voy a hacer nada por nada. He hecho unos cuantos amigos, soy generoso con otros escritores y con algunos editores, me llaman para hablar en los periódicos. Hombre, ¿qué harían ustedes en mi lugar?

4. Yo no sé aún lo que soy, pero le doy con el palo a todas las piñatas. Hay que estar atento y, de paso, irse allanando el camino. Hace un par de años a éstos no les hacía caso ni cristo y ahora hasta salen en el Babelia ese. Psss. Yo también soy escritor. Todavía no ha llegado mi hora. Pero llegará. Ahora estoy inmerso en la tarea más ingrata, hacerle la pelota a esos cabrones, decir que sus mierdas de textos son excelentes, cerrar los ojos y taparme la nariz para aguantar el mal olor. Todo sea por publicar.

5. Yo soy un crítico supermoderno, de lo last. He conseguido, con mucho esfuerzo, crear una serie de teorías retorcidas y huecas y ahora hasta tengo un harén de acólitos que aplauden todo lo que digo. Pronto dominaré el mundo intelectual. Ja, ja, ja.

6. Yo soy aún más vago que el vago de antes y sólo me dedico a informar de lo que informan los periódicos: si muere éste o aquél, si a ésta o la otra le han dado un premio, entrevisto a quien se cruza por delante. El caso es que tengo que actualizar a diario el blog para que no se me escapen los futuros clientes. No lo he dicho, pero yo soy un profesional. Aspiro a vivir de esto y para que esto sea rentable no puedo dedicarle más que el tiempo que puedo dedicarle.

7. Yo soy un friki. Lo mismo hablo de videojuegos que rememoro el cuarto episodio de Star Trek o apunto la relación entre Blade Runner y las plantillas Devor-olor. Soy un relacionista, así todo el mundo se entera de que leo muchos libros, juego a la consola, veo series y pelis, leo cómics. En algo tengo que emplear mi tiempo, socapullos.

8. Yo es que soy muy fea. Y estoy gorda. Casi no leo libros, pero los cuatro o cinco que me he leído me cundieron mucho. El blog me ayuda a conocer gente. Si persisto, a lo mejor me echo un novio. O una novia. No sé. Me está entrando hambre.

9. A mí lo que me gusta es tocar los cojones, así que me abrí un blog para llevarle la contraria a todo el mundo. Que tal libro es una obra maestra, pues yo lo abro y me cago dentro. Que la generación nosequé es el acabose, pues me despiporro. Porque yo soy un humorista. Y el humor es libre. Así que nadie puede decirme nada, porque eso significaría que no tiene sentido del humor, y a la gente no le gusta que le recuerden que no tiene sentido del humor. ¿Es o no es?

10. Y entonces me dijo el redactor-jefe: Luisito, coño, por qué no te abres un blog y te infiltras entre esos tontolabas de los blogs literarios. Hay que estar atento a todas esas mamarrachadas. Que no me entere yo que se pasa hoy el día y no dices ipod, chat o post. ¡Estos becarios!

11. Yo soy un experto y, por tanto, sólo recomiendo libros que no conoce ni cristo, de las mismas tres o cuatro editoriales siempre. Y de argentinos. Me ponen mucho los argentinos. Si tienen apellido judío mejor que mejor. Yo me descojono de los del bombo y platillo pero luego hago lo mismo. También me jiño en los concursos literarios, pero si hay sarao de por medio y dan buenos canapés y buen vino no les hago ascos. Los escrúpulos son para los débiles mentales.

11 de mayo de 2009

DOS BUENOS LIBROS



Dos buenos libros que en su día no reseñé por falta de tiempo:

La línea Plimsoll, de Juan Gracia Armendáriz, un libro profundo y desolador, casi inhumano.
París no se acaba nunca, un libro frívolo y superficial, muy humano.